
Un experto de la ONU ha pedido a las empresas que corten sus vínculos con Israel y que sus ejecutivos rindan cuentas por permitir y beneficiarse de crímenes como la ocupación ilegal, el apartheid y el genocidio en los territorios palestinos ocupados.
El llamado a la acción de la Relatora Especial de la ONU, Francesca Albanese, aparece en un nuevo y mordaz informe en el que nombra a más de 60 empresas, incluidas importantes firmas de tecnología como Google, Amazon y Microsoft, alegando su participación en lo que ella llama «la transformación de la economía de ocupación de Israel en una economía de genocidio».