mpr21 Redacción
Los mensajes de la estación militar rusa de onda corta UVB-76, conocida por “buzzer” entre los radioaficionados, han empezado a seguir la misma estructura de codificación observada en los ejercicios previos de preparación para la guerra nuclear o de alerta máxima. Cada línea incluye una marca de tiempo, seguida de una cadena que comienza con «NZhTI», una serie de cinco dígitos, un nombre en clave, como “utkoroy” y dos conjuntos de cuatro dígitos.
Este formato corresponde a las comprobaciones de preparación del mando nuclear, las alertas de movilización o las señales estratégicas, pero su contenido no se logra descifrar porque el sistema es de un solo uso. Solo el receptor con el bloque correspondiente puede descifrar las instrucciones.
Últimamente la emisora ha intensificado sus transmisiones. El 30 de mayo emitió una serie de misteriosas formas de palabras, incluyendo “ray-torg”. Anteriormente, el 26 de mayo, transmitió tres nuevos mensajes en sus frecuencias en 24 horas.
Pero ayer la aparición repentina de ocho mensajes codificados distintos en 24 horas es extremadamente inusual y podría reflejar una alerta nuclear. Como ya expusimos ayer, un ataque a la fuerza aérea estratégica, como el del domingo, es equivalente “técnicamente” a un ataque nuclear.
En Rusia, la secuencia de emisiones cifradas se ha correlacionado históricamente con eventos como ejercicios de la OTAN cerca de las fronteras rusas, accidentes estratégicos o momentos en que la doctrina rusa exige una demostración de la continuidad de las comunicaciones militares durante las transmisiones nucleares, de acuerdo con la “Doctrina Perímetro”).
En el contexto de los ataques ucranianos del domingo, las emisiones UVB-76 podrían representar una verificación de los canales de alerta de las fuerzas nucleares o una demostración simbólica de preparación dirigida contra los adversarios de la OTAN.
En cualquier caso, da la impresión de que Rusia está activando sistemas de comunicaciones estratégicas previamente reservadas para los peores escenarios de guerra.
La emisora de onda corta rusa UVB-76
La estación de onda corta rusa UVB-76 es uno de los iconos más misteriosos de la Guerra Fría. Los radioaficionados de todo el mundo siguen sus emisiones en sitios especializados como Pryom. Transmite en la frecuencia 4625 kHz (y ocasionalmente en 4810 kHz). Es una de las más famosas “emisoras de números” rusas. Emite continuamente un zumbido monótono (“buzz”) aproximadamente 25 veces por minuto, con breves interrupciones.
Algunas veces el zumbido se detiene y una voz (generalmente masculina) pronuncia códigos en ruso, como números, nombres o secuencias alfabéticas. La inteligencia occidental cree que está operada por el ejército ruso o centrales de inteligencia, posiblemente para comunicaciones cifradas con unidades militares o antenas de espionaje en el extranjero.
El sistema podría estar vinculado al sistema “Dead Hand” (Mano Muerta), un mecanismo soviético automatizado de de alerta temprana y represalia nuclear.
Aunque es posible que comenzara a emitir en 1976, sus señales se detectaron por primera vez en 1982 y procedían de Povarovo, cerca de Moscú. Pero en 2010 hubo un cambio y se sospecha que la señal proviene de otros lugares, como San Petersburgo o Kaliningrado.
En 2010 el zumbido se detuvo por 24 horas y se escucharon sonidos de fondo (como pasos y voces), lo que generó teorías sobre una posible evacuación o cambio de operadores.
Pequeños drones contra bombarderos gigantescos
Poco a poco se van conociendo más detalles del ataque ucraniano del domingo con drones contra aeródromos estratégicos rusos que dañaron -y en algunos casos destruyeron- bombarderos Tu-95, así como Tu-22 y aviones de transporte suplementarios.
Las fuentes ucranianas refieren el empleo de 117 drones FPV introducidos clandestinamente en Rusia gracias a una logística compleja que exigió la construcción de cabinas móviles de madera. Los drones viajaron escondidos debajo de los juguetes telecomandos en los camiones y fueron ensamblados en almacenes alquilados para la ocasión.
Cuando los camiones aparcaron en las cercanías de los aeródromos, los techos se abrieron para lanzar los drones hacia las pistas y los hangares. Según las fuentes ucranianas, a diferencia de las rusas, los participantes en el operativo pudieron regresar a Ucrania antes del comienzo del ataque.
El domingo, en una alocución nocturna, Zelensky dijo que habían destruido más de 40 unidades de la aviación estratégica rusa. Como Rusia solo cuenta entre 47 y 55 aparatos activos, si las cifras del Presidente ucraniano resultaran ciertas, sería un golpe muy duro.
Es posible que Zelensky se refiera a aparatos alcanzados o incendiados, de manera que una parte de ellos se pudiera reparar. Las fuentes rusas refieren que entre uno y cinco Tu-95, dos Tu-22 y un An-12 podrían haber sido destruidos o inutilizados permanentemente. No obstante, Rusia ya no fabrica bombarderos Tu-95.
En cualquier caso, es obvio que un pequeño dron no puede dañar un gigantesco bombardero estratégico Tu-95. Se necesitan varios, excepto si el avión estuviera lleno de combustible y los equipos de bomberos de la base no reaccionaran a tiempo, lo cual, por supuesto, es una posibilidad durante un ataque realizado en domingo.
Las bases rusas cuentan con unidades de bomberos y saboteadores contratados por Ucrania han incendiado varias aeronaves rusas en los últimos dos años, que siempre fueron extinguidos y reparados en cuestión de días. La probabilidad de que un gran número de Tu-95 quede completamente destruido es baja, pero el efecto propagandístico de este tipo de operaciones es, en cualquier caso, muy importante.
Según parece, los drones utilizaban la red telefónica LTE rusa, conectándose a ella mediante tarjetas SIM locales, una táctica empleada desde hace tiempo por ambos bandos.
También circulan rumores de que los drones estaban movidos por inteligencia artificial, lo cual es falso. Se controlaron mediante aplicaciones informáticas de código abierto, y las comunicaciones se realizaron a través de redes móviles, como indican las antenas receptoras de señal LTE captadas en las imágenes.